! Si les vierais sonreir...!

No había hecho más que introducir la llave en la cerradura de la cancela que da paso al interior de la urbanización, cuando una dulce voz penetró en mis oídos - ! Chiquitín, chiquitín !-.
Súbitamente giré la cabeza, alcé la vista y tras un perro, que se levantaba sobre ellas como si de una colosal obra, de estas que se hacen hoy por las calles de Moya se tratara, las mellucas sonrisas de dos pingos que apenas superaban el medio metro del suelo me encontré.
-¿ Qué tal guapisimas ?- inquirí yo con el tono bobalicón que suele emplearse cuando de niños se trata.
-¿ Este año vendrás en verano a jugar con nosotras?-, respondieron radiantes ellas.
-No lo sé Palomita, si os portais bien...puede-.
Un morro arrugado y un entrecejo fruñido denotaban que la respuesta no las había entusiasmado.
! Jooo chiquitín, es que ni siquiera sabes como nos portamos porque no estás nunca !.
De verdad, tras esa exclamación se me vino el cielo encima. Ese triste rostro en dos macaquinas de apenas 6, 7 añitos...ufff.
Sólo quería escribir este post para dedicarselo a los niños de mi barrio, con los que tanto me río verano sí, verano también y, para decirlos que claro que estaré allí jugando con ellos pero, !que por dios!, no me vuelvan a poner esa cara que luego me camelan.